jueves, 30 de junio de 2011

Capítulo 4

*Te odio flacucho*



-¿Es..Estas bien?- balbuceo mientras yo ahogaba mis sollozos en su pecho. Negué con la cabeza. ¡Era tan tope! Como… ¿Cómo me había pasado esto?.. Oh si lo olvida, el chico flacucho me había puesto el pie. ¡Qué cruel era!. Yo no quería llorar me vería aún más tonta de lo que me había visto. Tenía un nudo enorme en la garganta que por más que tragara no se me quitaba. ¡Ahg! Yo siempre me había avergonzado y había hecho cosas tontas enfrente de cámaras, pero jamás me había caído y menos frente a cámaras que trasmiten  para el mundo entero. Me abrazo fuerte rastas y luego me separo de el despacito. Me sonrió, pero yo no pude regresarle la sonrisa. -Tienes los ojos mucho más claros. – Me sonrió. Lo que pude hacer era bajar la mirada y sentí que mis mejillas iban tomando un color tono rosa pálido.- Celeste clarito.-agrego. Lo mire, el me sonreía y yo pues también lo hice.

-¿Estas bien? –Era otra voz masculina. Me voltee solo para encontrarme a un hombre robusto a decir verdad, con unos lentes negros, y con pantaloncillos.  Me le que viendo.- Oh! Se me olvidaba. –Se llevó un mano al rostro  hiso como si se pegó.- Soy Gustav. – me sonrió, trate de sonreírle también, pero solo me salió una fea mueca. Se acercó a mí y yo me despegue de mi salvador, el rastas. Gustav me saludo con un beso en la mejilla.-Disculpa a mi amigo. –me pidió. Negué con la cabeza. No estaba lista para perdonar y mucho menos si el flacucho ese no me lo pedía el mismo.

-Si disculpa a mi hermano. –Voltee a ver al chico rastas. Abrí los ojos al tope. ¡Me estaba mintiendo!... Negué con la cabeza. Ese no podía ser su hermano. Ni siquiera se parecían, o bueno los vi por medio segundo, tal vez si se parecía. Tenía que verlos mejor, pero aun así, los hermanos se parecen en algo tiene “aires” al otro.- Hermanos, gemelos. –agrego. Es si no me lo iba a creer. Esto era un truco, para ver si yo caía.

-no te creo. –le dije burlándome de lo el dicho. Es que era raro, los hermanos, gemelos, tenían que ser idénticos, pero ellos, no eran idénticos. NADA. No se parecían en absolutamente nada.
-Enserio. –me miro serio.  Yo seguían sin creerle. Es que no era posible, eran completamente diferentes. Unos se maquillaba y vestía pegadito y el otro no se maquillaba y se vestía demasiado flojo.- mira– saco su billetera y me dio una seña para que me acercara a el con la mano.- ves. – me tendió la foto. Eran dos pequeñines vestidos con un overol azul y en las manos de cada uno estaban sujetando un globo. ¡Que ternura!- somos Bill y yo. –no comprendí. Fruncí el ceño ¿así se llamaba el flacucho?- Mi hermano, gemelo, Bill. –volvió a repetir como si no comprendiera. En realidad yo no lo hacía, no comprendía. Pero al menos tenía que pretender que si lo hacía. Ese golpe seguro me había dejado más lenta de lo que yo era.

-aahh. – cante al entender. Sentí que me abrazaron de la espalda. ¿Quién era? ¡le iba a dar duro no tenía derecho a abrazarme! Vi mi cuerpo y ¡dios eran cuatro manos! Me entro un ataque de pánico.

-¿Megan, estas bien?- esperen yo reconocía esa voz. Adam. Intente voltearme pero fue invalido ya que también otro me abrazaba. Me sentí sofocado, no me gustaba mucho que me abrazaran.

-¿Megan?. – escuche mi nombre por el otro extremo de mi hombro era Jake.  No me dejaban moverme ya que eran más altos que yo. Aparte a uno lo tenía a un hombro y al otro en el otro hombro.

-si.- dije entrecortada. Me dejaron de abrazar y pude suspirar aliviada. Se había vuelto un tipo circulo y yo era la más pequeña. Me sentí enana. Adam y Jake habían empezado a hablar de carros y de rap. Cosa que a mí me interesaba poco, así que no participa en su “interesante” conversación.

Me aburría así que fui me fui de ahí. Empecé a caminar sin rumbo. Mucha gente se me quedaba viendo y se reía de mí. Suspiraba para tragarme las lágrimas. Esto era feo, no me gustaba que la gente se burlara. A causa de eso decidí caminar con la mirada baja. Camine y camine.
Levante la mirada
¿Dónde estaba? Empecé a ver para todos lados y las luces se estaban apagando solo quedaba una. Y ahí se encontraba alguien.  Solo se veía la silueta de este. Esto era como el jardín, tenía el césped mal cuidado. Y me estaba aterrando. Mientras empezaba a caminar me fui arrepintiendo. ¿Qué tal si era un violador? … Pero vamos aquí e Alemania era seguro. ¿Y si me quería secuestrar?... Pensamientos malos invadieron mi cabeza. Era tanto que ya no quería seguir caminando hacia la sombra. Yo misma me había dado miedo.
Camina Megan…
Me anime al ver que mis pies ya no se movían. Oblique a mis pies que se moviera hasta que llegue a donde estaba esa sombra. No se vea muy claro aun pero por lo menos no se veía malo. Era bastante alto y traía ropa negra o bueno al menos así eran sus pantalones y con la chaqueta que andaba.

-Disculpe. –Le dije lo suficientemente cerca para que me oyera. Aun así estire el brazo y le pique el hombro. Volteo su rosto y gran sorpresa que me dio. Puse los ojs como platos. ¡Dios era… era...el!. Trague en seco.-¿Qué … Que haces aquí?. –pregunte con un voz medio molesta.

-Que te importa nada. –Espeto con voz molesta. Fruncí el ceño. Y a este que le pasaba. Primero me pone el pie y luego me grita. No dije nada pensando en el insulto que le iba a dar a él.-Vete. –ME hecho molesto.

-no quiero. –En mi mente se habían generado bastantes insultos como para ofenderlo. –Además tú me debes una disculpa. – Me puse enfrente de el y le puse el dedo índice en el pecho. Este se quedó sorprendido y luego abrió la boca.

-tu era la torpe que se cae. – se defendió. Yo no era torpe. Bueno si, un poco pero…

-Tú no debiste ponerme el pie.- lo rete acercándome más a él. – Eres un estúpido.

-¿Y tu no?.- espeto mas molesto.

-no.- Le conteste rápido.- pero tu... Tu era.. ahg. –le di un golpe al piso con mi pie izquierdo. No tenía idea de cómo insultarlo. Todos los insultos que tenía en mente hacia algunos segundos se me habían ido de la fuera que tenía.  Este sonrió ganador.- No te rías.- hable con coraje. El no tenía por qué burlase de mi.

-Era una niñita estúpida.- Me sentí ofendida. Yo si era un niñita, pero un una estúpida. Abrí la boca para decir algo pero el empezó a hablar primero. – Eres un entrometida, te metes donde no te llaman… Te pues ir. –Me siguió hablando amargado. Negué con la cabeza. Yo no me iba a ir. Estaba que me hervía la sangre de lo molesta que estaba. Quien era este para hablarme así. Ni siquiera me conocía.

-Deja de hablarme así…-Chille.-¿Quieres?.- seguí chillando. No tenía ni la menor ganas de irme de aquí, pero al final lo iba a terminar haciendo. –Todo lo que aparentes es un mentira…. Eres un mierda.


Y la pelea continuo tanto que hasta los medio nos habían encontrado peleando. Habíamos salido hasta en las noticias. Nosotros viendo las cámaras no nos importó y cada uno siguió insultando al otro. Pase la mayoría de los premios peleando con el flacucho. Hasta que el rastas y Gustav & otro que no concia se acercaron a decirnos que ya parábamos. Luego llego Adam y Jake. A mí me sacaron chineada de ahí. No quería dejar de pelear con Bill Adam me tuvo que llevar chineada.
!Tontos
Ahora estaba en la casa. Amargada viendo la tele, para ser exactos las noticias. En espectáculos salían nuestra pelea. Suspire frustrada. No sabía cómo arreglar este problema. Aparte la disquera me iba a matar por hacer un escándalo. Mark me iba a ahorcar y para colmo mi mama ya me había regañado.






Megan …. Megan megann… Quiero darle sentido a la fic ya.. pero falta mucho! & además no tengo muuuuchas seguidoras! D’:
Bye! D': Manan otro!(: 

2 comentarios:

  1. jajajajajaa demasiado bueno este capitulo, por que bill? jejee lo descubrire...Besitos, Siria

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